Deirdre nació una noche en la que el Gran Rey de Irlanda celebraba un banquete mientras su bardo amenizaba la fiesta. De pronto alguien entró con la noticia de que la mujer del bardo había dado a luz, entonces el druida Cathbad auguró que aquella niña se llamaría Deirdre, que tendría una belleza indescriptible y que tanto héroes como reyes lucharían por ella matándose unos a otros por conseguir sus favores, llegando así al país el dolor y guerra.
Con tal profecía y para evitar a Irlanda la miseria, se decidió que lo mejor sería llevarse a la niña y matarla.
Sin embargo el rey ordenó que la recluyeran bajo la tutela de una poetisa y que cuando alcanzara la edad, el mismo se casaría con ella.
Así Deirdre creció recluida, pero un día al mirar por su ventana vio como unos cuervos se alimentaban de un cordero, y prometió que su amado tendría los labios rojos como la sangre, el pelo negro como las plumas del cuervo y la piel blanca como la nieve. Su tutora la dijo que ella conocía a alguien así, y Deirdre la pidió que se lo llevase ya que si no enfermaría por su amor.
Así llegó un día Naisi al lugar donde esta vivía y la esperó , cuando se vieron por primera vez se enamoraron y quedaron callados, aunque pronto Naisi a pesar del mio a la represalias del rey hacía él por hacer lo que estaba haciendo, le declaró su amor y la pidió que se escapara con él y junto a sus dos hermanos y sus seguidores. Decidieron escapar de Ulster y vivir su amor en las tierras de Albán en Escocia.
Deirdre y Naosi lograron vivir felices siete años en el nuevo reino, pero el rey lleno de ira decide mandar a Fergus (uno de los caballeros más honestos) a que le otorgue el perdón y su permiso para que instalen de nuevo en Ulster. Después de haber vagado mucho por distintos lugares y confiando plenamente Naoisi en la palabra del rey, decidieron aceptar. Deirdre sospechaba que algo no iba bien, puesto que conocía de sobra que el rey no tenía un corazón tan grande como para perdonar lo que habían hecho, e instó a Naoisi a que no fueran.
Viajan hasta Irlanda en barco y al desembarcar se encuentran que Fergus no les podía escoltar, a lo que esté puso a sus dos hijos como escoltas de la pareja.
Al ir de camino a Ulster Deirdre tuvo un mal presagio y diciéndoselo a Naoisi este no le hizo caso y prosiguieron su camino. Al llegar ya al castillo se les instala en los aposentos de la Rama Roja, una pequeña cabaña en la cual pasan la noche jugando al ajedrez, y donde de repente el rey manda a sus sicarios a que los maten a todos, pero Oisin y sus hermanos junto con sus seguidores les prestan batalla, consiguiendo terminar con ellos.
Colérico el rey manda un segundo grupo a que les ataque ya que Naoisi le había quitado a su bien más preciado que era Deirdre, en esta batalla caen muchos de los seguidores de Naoisi, y se ven forzados a salir de la casa escoltándose entre ellos para buscar un sitio que fuera más seguro para todos ellos. El rey al ver su desesperación les ofreció que sin entregaban sus armas y se sometían a él los nombraría como sus más distinguidos guerreros. Deirdre seguía sin creer en la palabra del rey pero de nuevo Naoisi aceptó, soltó sus armas y según el rey los vio desarmados los hizo apresar y atar.
El rey pidió que alguien los matara, pero nadie lo quería hacer, hasta que entre los mercenarios existía uno al que Naoisi había matado a su familia y aceptó hacerlo. Los hermanos debatieron cual de ellos sería el primero en morir, pero ninguno quería ver como eran decapitados el resto de sus hermanos, por los que los tres estiraron sus cuellos hacía delante a la vez para que les sesgaran la vida de un solo golpe.
Deirdre al ver la escena lanzó un lamentó que se escuchó en toda Irlanda. El rey ordenó que se la llevaran , pues creía que su venganza había llegado a su fin, pero en un momento de descuido Deirdre se suicida sobre el cuerpo de su amado.
Mitología Celta 