
Una semana más seguimos viajando por España y su patrimonio. La semana pasada visitabamos Puente Tablas y su santuario y os hablaba de una diosa y un guerrero y esta semana viajamos a otro poblado Íbero, esta vez al de Castellar de Meca en Valencia. ¡Vamos allá!
Hoy nos vamos a situar en el poblado de Castellar de Meca, en la Comunidad Valenciana (España) cerca de Ayora y limitando con Castilla la Mancha. Vistamonos como los antiguos íberos y veamos el lugar como ellos lo veían.

Estamos en el siglo IV a. C y el poblado comenzaba a crecer. Tenía todo lo necesario para que fuera un buen asentamiento. Situado en lo alto de la sierra, con despeñaderos alrededor actuando de defensa natural y con el único acceso desde la cercana sierra del Mugrón.
El alimento no era un problema puesto que se podía cazar en los cercanos montes, sus cultivos se realizaban en la parte baja de la sierra e incluso podían practicar la pesca en el, ahora seco, pantano de San Benito.
Pero seguro que estáis deseando emprender el camino que antiguamente se realizaba. La ruta que se nos propone dura unas 3 horas, en las que pasearemos por donde antaño hubo una rica y fluida vida, ya que el yacimiento se encontraba en una ruta comercial.
Ascenderemos hasta llegar a la Fuente de la Meca, lugar donde nos refrescaremos. La fuente ibera es de un solo caño y existe un abrevadero de época medieval debajo de una higuera.

Cogeremos dirección al acceso de Camino Hondo ya que era la entrada principal por donde accedian animales y personas. Se cerraba por un portón de los quedan vestigios en sus piedras laterales y lo protegían tres torres, una a cada lado de la puerta y otra enfrente de la entrada.
Llegados a este punto entenderemos porque se le llamaba Camino Hondo y es que delante nuestra se extiende una vía de 200 metros, considerándose una obra excepcional de la ingeniería prerromana. En el centro de ella se puede encontrar unos huecos en el suelo los cuales servían para no resbalarse, así como unos huecos circulares que servían para apoyar troncos con los que hacer palanca en caso de necesitarlo.

Pero si algo me llama la atención de este lugar es el sistema de recogida de aguas con el que cuenta. Labradas en granito y conectadas entre sí haciendo que el agua fuera conducida a los aljibes. Llegándose a contar 112 piezas.
Pero nuestro viaje finaliza aquí aunque hay muchas más cosas por descubrir. Si queréis conocer la Cueva del Rey Moro y más curiosidades las tenéis todas en la fantástica guía escrita por Mar Llupart Tormo llamada «Desentrañando los vestigios del poblado íbero de Castellar de Meca».

Espero que hayais disfruta una semana más de nuestra pequeña escapada y nos vemos la semana que viene en la que será nuestra última salida por España.
Esta entrada fue publicada en mi cuenta de X el 12/09/2023.
